Por Eva Diz
Guest blogging… ¿sí o no? Es la pregunta de moda, el tema del que todo el mundo habla (y, sí, por supuesto, yo no iba a ser menos ;P). Se ha vuelto a sembrar el caos, la duda. Ha llegado la crisis de muchos, el hambre de otros. ¿Es un problema hacer guest blogging? ¿Me van a penalizar si sigo compartiendo mis artículos o colaborando en otros blogs? ¿Se ha terminado la breve (pero intensa) historia del autor invitado?
Okay, I’m calling it: if you’re using guest blogging as a way to gain links in 2014, you should probably stop. Why?
Sí, amigos, sí. Google la ha vuelto a liar parda. Hace unos días, el más dicharachero y mediático de sus ingenieros, el omnipresente Matt Cutts, ha soltado una de esas perlas que son capaces de hacer temblar los cimientos de muchos negocios construidos alrededor de este nuevo espacio virtual y del Gran Buscador que todo lo sabe.
Señores, paren las rotativas. O no…
Volvamos a la pregunta: Guest blogging… ¿sí o no? Si hablamos de posicionamiento web, SEO y estrategias de generación de enlaces (Link Building) pues no me queda otra que tirar del gen natural y contestaros a la gallega: depende. Depende de un montón de cuestiones, algunas sobre las que tenemos control directo, otras sobre las que no. Pero todas juntas hacen que aquella panacea que se nos presentaba en noviembre de 2012 cuando escribí aquello de ¿qué es el Guest Blogging? y las plataformas de Guest blogging en castellano un camino de corto recorrido. Sobre todo para los que basen su negocio en él o pretendan sustentar su estrategia de posicionamiento natural en buscadores en esta técnica de autor invitado.
Aprovecho y respondo así desde aquí a Nicolás, que dejaba aquí un comentario hace unos días señalando la nueva aventura en la que él y su equipo se habían embarcado: un sitio en español para empresas que quieran hacer guest post. Ellos redactan y, con una buena red de distribución y plataformas en las que ubicar el contenido, ofrecen al cliente al final de mes una cifra x de enlaces de calidad a los sitios web de esas empresas. Buena idea, ¿no?
Buenísima… Hace un año.
El guest blogging como técnica para conseguir enlaces de calidad se va a acabar, Nicolás. Lo siento, pero es lo que creo. Cierto es que Cutts dice mil y una cosas por segundo y que algunas de ellas son simples amenazas que se las lleva el viento, pero, en este caso, me da la nariz que algo de esto va en serio. De hecho, sé de buena tinta que hay empresas internacionales de bastante entidad en Internet (es más, cuyo negocio es solo la venta por Internet) que han recibido llamada directa de Google y penalización por abusar de esta técnica.
Yo misma considero que se ha abusado y se abusa de esta fórmula para conseguir enlaces de calidad que beneficien al posicionamiento. Si se lee con detenimiento la definición que escribí en 2012 acerca de lo que representa hacer guest blogging y de cómo debería hacerse, muy poco es aplicable a lo que últimamente estábamos viendo todos:
- Contenido mediocre por toneladas,
- peticiones para participar en tu blog automáticas que te entraban en el email por decenas (al día),
- artículos que poco o nada tienen que ver con la temática de tu blog,
- textos con insufribles faltas de ortografía y errores gramaticales de libro,
- artículos rehechos a partir de otros artículos (descaradamente y sin pudor)
En fin. Hablo por experiencia. Una vez intenté editar uno de esos artículos que me llegó desde el otro continente. La temática era interesante (dominios ccTLD) y encajaba perfectamente con mi blog. Contactó una chica muy amable, me pidió respetuosamente un espacio en mi blog y yo le pasé mi lista de sine qua non. Ella accedió.
Tardó más de una semana en enviarme el artículo y yo pensé que eso se debía a que lo estaba preparando a conciencia (a mí, personalmente, escribir una entrada aquí nunca me lleva menos de 2 horas, por corta que sea, y no cuento la fase información/documentación). Recibí un texto eterno (bien, yo también soy de párrafo largo), con 2 faltas de ortografía por frase: sí, en alguna frase toooodas las palabras tenían algo mal.
Traté de editarlo. Dos veces. Nada. Lo dejé. Me puse de nuevo y llegué a editar hasta 300 palabras… Y abandoné: le iba a regalar a una persona (empresa) un enlace desde mi blog y encima tenía que hacerle el trabajo. Pero eso no era lo peor: tenía que dejar que aquel artículo os llegara por email y os hiciera perder el tiempo. Molestaros y enfadaros.
No. Eso no es bueno, ni para el dueño del blog, ni para el lector ni para el autor invitado, si me apuras. Eso es spam. Hasta ahí todos de acuerdo, ¿no?. Ahora es cuando empiezan las caras y los peros: sí, sí, tienes razón. No todo el guest blogging era/es así y, de hecho, hay blogs de muchísima calidad que sigo como si fueran la biblia SEO y que son puramente eso: una plataforma de colaboración en la que autores acreditados y expertos escriben sobre un tema que manejan y del que los demás pueden aprender algo.
¿Pagan entonces justos por pecadores? Sí, en eso no hay novedad. Suele pasar y va a seguir pasando. Nos comemos a nuestros propios hijos, señores. Técnica que parece que funciona, técnica que quemamos. Y en el campo quemado… ya se sabe: no hay enlace que cultivar.
No obstante, pero, sin embargo… Depende.
Desde que Matt Cutts dijo lo que dijo (aquí podéis leer el artículo completo: The decay and fall of guest blogging for SEO) han surgido peros y no osbtantes por toda la red. Blogs y más blogs se han enzarzado en una espiral infinita acerca de lo que realmente quería decir Cutts y cuáles van a ser los márgenes que se puedan manejar sin herir la sensibilidad de Google.
Yo tengo mi teoría. Sí, si me preguntas otra vez eso de Guest blogging… ¿sí o no? Diría que depende. Que, como todo en la vida (y más en Internet), mientras se use con prudencia, no tendría por qué haber ningún problema. Que si eres una persona a la que le gusta escribir, que sabe de lo que sabe y sabe contarlo y además colaboras normalmente con sitios conocidos, en los que se te reconoce como colaborador oficial y se valora tu trabajo, no deberías tener ningún problema y podrás seguir disfrutando del privilegio y la libertad que ofrece Internet.
Pero si en tu pensamiento está seguir escribiendo artículos a los que dedicas poco más que 20 minutos de tu tiempo y en los que colocas tu enlace (o enlaces, o los enlaces de otro) como forma de ganarte la vida… Mi recomendación es que vayas buscándote otra forma de sustento. Con el paso del tiempo, aunque esta amenaza de Cutts sea finalmente solo eso, una mera amenaza para intentar frenar el spam, el orden lógico y natural de las cosas te expulsará de la rueda y, entonces, puede que sea mucho más complicado empezar de cero.
Moraleja: Use with caution.